Un adhesivo de montaje es un producto que se emplea para fijar diferentes objetos y materiales de manera duradera o permanente. Sin embargo, para que se logre esta finalidad hay que atender a las características de cada tipo y sus distintas aplicaciones. De eso, te hablamos en este artículo.
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¿Qué son los adhesivos de montaje?
Los adhesivos de montaje, también llamados adhesivos de construcción o adhesivos de unión permanente, son pegamentos que están especialmente diseñados para proporcionar una unión fuerte y duradera entre diferentes superficies, como metal, madera, vidrio, plástico, cerámica, etc.
Por su composición, este pegamento de montaje tiene la capacidad de ofrecer una adherencia inmediata. Además, cuenta con un elevado poder de relleno, lo que significa que no solo puede unir dos superficies materiales, sino que puede cubrir el vació que haya en alguna de ellos para lograr una fijación más resistente.
El avance de la tecnología también ha repercutido notablemente en ese sector, y en la actualidad es posible encontrar multitud de opciones de fijación extremadamente rápida y resistente. Estas sirven incluso de alternativa a otros medios utilizados tradicionalmente que son menos prácticos y que se basan en la mecánica, como las soldaduras o los remachados, entre otros tipos de unión.
¿Cuáles son las aplicaciones de un adhesivo de montaje?
Los adhesivos de montaje se presentan en un formato líquido, en gel o en pasta, y se activan al entrar en contacto con la superficie del material que deben unir. Para que sea eficaz y se consiga la mejor adhesión, es importante seguir con precisión las instrucciones del fabricante. También, antes de proceder con la aplicación, hay que asegurarse de que las superficies están limpias y bien preparadas.
No obstante, el paso previo a estas indicaciones es elegir el mejor adhesivo de montaje para los materiales con los que se vaya a trabajar o para las características de la sujeción. No será lo mismo unir dos superficies que son ligeras que otras con un peso muy elevado y que necesitan un pegamento que equivalga a una soldadura.
Así, dentro de las aplicaciones de los adhesivos de montaje encontramos los siguientes sectores:
Construcción
En la industria de la construcción, un adhesivo de montaje se puede emplear para fijar paneles de yeso o de madera, revestimientos, molduras y otros elementos decorativos en paredes y techos.
Maquinaria
La finalidad es unir componentes metálicos o plásticos, reemplazar fijaciones mecánicas, reducir el peso, aislar acústicamente y de vibraciones, y fijar materiales de distintas características. Los adhesivos de montaje son especialmente útiles en áreas de difícil acceso o donde las fijaciones mecánicas pueden generar problemas como vibraciones o corrosión.
Carpintería
El adhesivo se emplea para unir piezas de madera en la fabricación de muebles, gabinetes, marcos y estructuras. Con ellos, se evita la necesidad de usar clavos o tornillos visibles que puedan afectar el acabado estético y permiten unir maderas de diferentes tipos y grosores, lo que supone una mayor versatilidad.
Industria automotriz
Los adhesivos de montaje se utilizan en la fabricación y reparación de vehículos, para fijar elementos interiores, exteriores y componentes estructurales, como los paneles de la carrocería y el montaje de los cristales.
Industria aeroespacial, naval y electrónica
Las aplicaciones son la construcción y la reparación de elementos, la unión de materiales compuestos y estructuras de alta resistencia o la fabricación de dispositivos electrónicos, entre otras.
Arte y manualidades
Los adhesivos también se pueden emplear en proyectos creativos, como en maquetas, esculturas o trabajos artísticos.
Instalaciones y reparaciones en el hogar
Además de a nivel empresarial, un adhesivo de montaje también es eficaz en la instalación de estanterías, espejos, marcos, soportes para televisores y otras aplicaciones domésticas.
Tipos de adhesivos
Como hemos indicado, para saber cuál es el mejor adhesivo de montaje para una finalidad determinada, hay que conocer cuáles son los materiales a unir y la aplicación, pero también las características de cada uno de los pegamentos disponibles. A grandes rasgos, los tipos de adhesivos más comunes son los siguientes:
– Acrílicos. Unen superficies transparentes y proporcionan una fuerte adherencia en distintos materiales.
– Poliuretano. Son versátiles y se utilizan en aplicaciones que necesita una unión flexible y resistente al agua.
– Epoxi. Es un adhesivo de montaje extra fuerte y se emplea en aplicaciones donde se necesita resistencia a altas temperaturas y productos químicos.
– Silicona. Útiles en aplicaciones que requieren resistencia a temperaturas extremas y sellado hermético.
– Cianoacrilato o superglue. Tienen una rápida acción de unión y se recomiendan para unir materiales pequeños y delicados.
Ventajas de utilizar un adhesivo de montaje
Los beneficios de apostar por un adhesivo de montaje frente a las alternativas convencionales son múltiples, pero podrían resumirse en:
– Ahorro de costes. El gasto en material es menor que cuando se apuesta por las fijaciones mecánicas.
– Mayor flexibilidad. La naturaleza de un adhesivo de montaje es más ágil y flexible que la de las fijaciones mecánicas, lo que hace que resulte más fácil absorber el estrés.
– Mejores acabados estéticos.
– Peso más ligero.
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